Oración para después de comulgar
Mi amado, mi dulce amigo, cuatro cosas hoy te pido con mucha necesidad: paciencia para sufrir; fuerzas para trabajar; valor para resistir las penas que han de venir y me han de mortificar; temperamento sereno para poder resolver las cosas con santa calma y así tener en el alma perfecta tranquilidad. Esto vengo a suplicarte ¡oh mi Jesús adorado! en este día consagrado para servirte y amarte.
Amén